La redención de los esclavos es la obra de misericordia por excelencia: en el esclavo se encuentra a Cristo hambriento y sediento, desnudo y enfermo, peregrino y encarcelado (cf. Mt 25, 35-36).La Orden de la Santísima Trinidad, fundada por San Juan de Matha y aprobada por el papa Inocencio III en 1198, tomó la opción por los esclavos y los pobres en nombre y para gloria de la Santísima Trinidad hace ocho siglos.

La Orden, nacida en la época de las Cruzadas, siempre ha cumplido su misión en el camino de la paz. Los trinitarios liberaron a cientos de miles de esclavos cristianos y musulmanes. Durante siglos, el orden trinitario ha sido el lugar de encuentro humanitario de la Iglesia con el mundo del Islam. Hoy en día existen en el mundo muchos contextos de esclavitud, persecución y opresión a causa de la propia fe. En una larga lista de países, la misión trinitaria es cruelmente actual. Los trinitarios hemos procurado aliviar la plaga de la esclavitud: «Vuestra Orden ha hecho de la liberación de los oprimidos y del amor a los pobres un rasgo cualificador de su misión en la Iglesia y en el mundo» (Juan Pablo II, 7/6/1998). La Orden de la Santísima Trinidad, «tan antigua y tan nueva» (cf. Pablo VI, 9/1/1974), con la colaboración de la Familia Trinitaria, renueva su compromiso redentor en la fidelidad a sus orígenes. Esta Familia, presente actualmente en 32 países, cuenta con 600 religiosos, 300 religiosas, 2500 religiosos de los diferentes Institutos Trinitarios de Valence, Sevilla, Roma, Magliorca, Madrid, Valencia y Oblatos del Instituto Secular, 15.000 Laicos Trinitarios de las diferentes Asociaciones y una multitud de 250.000 Amigos y Colaboradores en todo el mundo.